La mordida cruzada es un problema dental que afecta a muchos niños y que, si no se trata a tiempo, puede provocar complicaciones a largo plazo en su salud bucodental y estética. En este artículo explicaremos qué es la mordida cruzada, cómo identificarla en los más pequeños y cuándo es el momento adecuado para buscar tratamiento.

 

¿Qué es la mordida cruzada?

La mordida cruzada es una anomalía dental en la que los dientes superiores no se alinean correctamente con los dientes inferiores. En lugar de encajar de manera natural, algunos dientes superiores muerden por dentro de los dientes inferiores. Este problema puede afectar tanto a los dientes frontales como a los molares y puede tener un impacto significativo en la salud dental y el desarrollo facial del niño.

 

Tipos de mordida cruzada

Mordida cruzada anterior

En la mordida cruzada anterior, los dientes frontales superiores muerden por dentro de los dientes inferiores, lo que genera un desajuste en la alineación de los dientes y puede afectar la forma en que el niño habla y mastica.

Mordida cruzada posterior

En la mordida cruzada posterior, los molares superiores muerden por dentro de los molares inferiores. Esta forma de mordida cruzada puede generar dolor en la mandíbula y problemas en el desarrollo de los dientes permanentes.

 

Señales de alerta de la mordida cruzada en niños

Identificar los signos de una mordida cruzada lo antes posible es crucial para tratar el problema a tiempo. Aquí te mostramos algunas señales comunes que pueden indicar la presencia de una mordida cruzada en tu hijo:

 

1. Dificultad para masticar o morder alimentos

Si tu hijo tiene dificultades para masticar o morder alimentos, esto puede ser una señal de que sus dientes no están alineados correctamente. La mordida cruzada puede hacer que la masticación sea incómoda o incluso dolorosa.

2. Desgaste excesivo de los dientes

El desgaste de los dientes es otra señal de alerta. Si los dientes de tu hijo muestran signos de desgaste excesivo o irregular, podría ser el resultado de un desajuste en la mordida.

3. Dolor o molestias en la mandíbula

Los niños con mordida cruzada pueden experimentar dolor o molestias en la mandíbula, especialmente al mover la boca o al masticar. Este dolor puede ser una indicación de que los dientes y la mandíbula no están alineados correctamente.

4. Cambios en la forma de la cara

En algunos casos, una mordida cruzada no solo afecta a los dientes, sino también a la estructura facial del niño. Si notas que la forma de la cara de tu hijo está cambiando, como una asimetría en el mentón o en la línea de la mandíbula, podría estar relacionado con la mordida cruzada.

5. Dificultad al hablar

La mordida cruzada también puede influir en el habla de los niños. Si tu hijo tiene problemas para pronunciar ciertos sonidos o muestra dificultad al hablar, esto podría estar relacionado con un mal alineamiento de los dientes y la mordida.

¿Cuándo deberías consultar al dentista?

La mordida cruzada no siempre se corrige de forma natural a medida que los dientes permanentes salen. Por eso, es fundamental llevar a tu hijo al dentista o al ortodoncista tan pronto como notes cualquiera de las señales mencionadas. En general, es recomendable que los niños comiencen su evaluación ortodóntica alrededor de los 7 años, cuando los dientes permanentes están comenzando a salir.

Un diagnóstico temprano permite al dentista detectar la mordida cruzada antes de que cause daños permanentes en los dientes y la mandíbula. Si se trata a una edad temprana, es posible corregir la mordida cruzada de manera más sencilla y con mejores resultados estéticos. ¿Quieres saber más sobre la odontopediatría? Te dejamos aquí uno de nuestros artículos.

 

Tratamientos para la mordida cruzada

El tratamiento para la mordida cruzada dependerá de la gravedad del problema y de la edad del niño. Las opciones incluyen:

 

1. Expansor palatino o disyuntor

En casos de mordida cruzada posterior, un expansor palatino o disyuntor puede ser utilizado para ensanchar el paladar y ayudar a corregir el desajuste entre los dientes superiores e inferiores. Este dispositivo se coloca en el paladar y, mediante un pequeño tornillo, se expande gradualmente. En nuestras redes sociales publicamos un vídeo de un caso de mordida cruzada en una paciente de 9 años, aplicando un disyuntor palatino.

2. Ortodoncia

En muchos casos, el uso de aparatos ortopédicos o brackets será necesario para alinear los dientes de manera adecuada. El tratamiento ortodóntico puede ser más largo en adultos, pero en los niños los resultados suelen ser más rápidos y efectivos.

3. Cirugía ortognática (en casos graves)

En situaciones más complejas, donde la mordida cruzada no puede corregirse solo con ortodoncia o un expansor palatino, puede ser necesaria una intervención quirúrgica. Sin embargo, esto es raro y se considera sólo cuando el problema es severo y afecta gravemente la función de la mandíbula y la estética facial.

 

¿Por qué es importante tratar la mordida cruzada?

El tratamiento de la mordida cruzada no solo mejora la apariencia estética de la sonrisa, sino que también previene futuros problemas dentales como el desgaste prematuro de los dientes, dolor en la mandíbula, dificultades al masticar y problemas de postura. Además, corregir una mordida cruzada a una edad temprana ayuda a asegurar un desarrollo adecuado de los dientes permanentes y una mejor calidad de vida a largo plazo.

 

La mordida cruzada es una afección común en los niños que, si no se trata a tiempo, puede tener repercusiones serias en la salud dental y el desarrollo facial. Reconocer las señales de alerta y actuar rápidamente es clave para garantizar que tu hijo tenga una sonrisa sana y bien alineada. Si crees que tu hijo puede tener una mordida cruzada, no dudes en consultar con los especialistas de la Clínica Dental García Somoza para una evaluación y tratamiento adecuado.